Un bonito camping en sí mismo. Pero ya no iremos allí. El servicio en el restaurante no es nada amable, tienes la sensación de que te abandonan rápidamente para dejar espacio a nuevos clientes. El supuesto recorrido de agilidad no se mantiene, los 5 obstáculos que contiene están viejos y podridos. Los perros tienen más posibilidades de lesionarse que de hacer deporte.

Gran camping animado con todas las comodidades. Espaciosos lugares. Prado terminado donde el propietario puede jugar con el perro, tomar el sol y nadar. Botes de basura con bolsas por todas partes. Instalaciones sanitarias súper agradables, gimnasio, supermercado, parque infantil,... La desventaja es que solo se paga en efectivo en el supermercado (afortunadamente, el cajero automático está en la recepción) y en el restaurante y la cafetería ya no sirven bebidas después de las 21:30.