Ferme de Jericho

Estábamos completamente solos. El hijo pequeño de la casa nos recibió con mucha amabilidad y nos explicó todo como un auténtico profesional. Era un lugar tranquilo, y nuestro perro estaba feliz porque podía correr libremente. Consejo para el dueño: un cubo de basura.

Excelente aparcamiento, muy amables. También hay una máquina expendedora de pizzas. Hice todo con un traductor. ¡Genial! 😀

Solo 4 plazas con césped, zona muy tranquila. El dueño es amable y solo habla francés. Para conversar usa su aplicación de traducción. 10 euros por noche, electricidad incluida. Nada del otro mundo, pero para nosotros estuvo perfecto.